Os dejamos la sección del programa donde hablamos de las revueltas que acontecieron en Turquía este verano
Turquía es un país de mayoría islamista, pero en el que existe también una fuerte tradición de separación entre la religión y el Estado. Sin embargo esto parece estar en serias dudas desde la llegada al poder del actual primer ministro turco Tayyip Erdogan del Partido de la Justicia y el Desarrollo, puesto que ocupa desde 2003.
Con el gobierno
de Erdogan se ha vivido un fuerte desarrollo económico en Turquía que está
generando muchos puestos de trabajo pero que está teniendo un alto precio, se
está produciendo un fuerte y descontrolado desarrollo urbanístico, un férreo
control de las libertades y de los derechos de los trabajadores, por ejemplo, en
Turquía están prohibidas las huelgas generales, y un progresivo e inexorable
acercamiento del gobierno y las leyes del país al islamismo, por lo que a la
política de Erdogan se le empieza a denominar de Capitalismo religioso o
Capitalismo islámico.
Entre otras cosas Erdogan está prohibiendo el alcohol a ciertas horas del día, está “aconsejando”
a las mujeres como vestir, cuantos hijos tener, etc., y ahora, además, está
intentando introducir la religión islámica en la educación, así, por todo esto
y muchas otras cuestiones uno de las peticiones más repetidas por los
manifestantes era la dimisión de Erdogan
Las revueltas en Turquía comienzan con la acampada de un grupo de ecologistas dentro de un parque en el
centro de Estambul para defenderlo de ese urbanismo descontrolado que más arriba comentamos y que quería destruirlo para construir el enésimo centro comercial
de la ciudad.
La resistencia
de estas personas se prolongó durante varios días del mes de mayo, algo que acabó con la paciencia de Erdogan y del gobierno de la
ciudad, que como era y es habitual, mandaron a la policía a que se emplease con
dureza contra los manifestantes, utilizaron gases contra los manifestantes, arma que junto a
los cañones de agua serán muy habituales durante todas las protestas turcas video desalojo parque Gezi
La extrema
dureza empleada en estos primeros días contra los defensores del parque
encontró una respuesta y solidaridad en las redes sociales, estas sirvieron
para movilizar e informar de lo que sucedía en el parque Gezi, ya que todos los
medios de información turcos callaron lo que sucedía y sucederá en Gezi, Taksim
y en muchas ciudades de Turquía, debido a la falta de libertad de prensa que
sufre el país y a unos medios controlados por el gobierno
El 28 de
mayo se produce ya el primer gran enfrentamiento de manifestantes con la
policía, lo que comenzó siendo una pequeña protesta por motivos ecologistas y
urbanísticos se está convirtiendo en una protesta de alcance nacional y con
unas pretensiones mucho mayores. De
repente el parque Gezi se convierte más en un símbolo que en un motivo de
protesta y los manifestantes pasan a pedir más libertad, más democracia, y
sobre todo el fin del gobierno de Erdogan que identifican con el autoritarismo
Los enfrentamientos
aumentan tanto en participación como, y sobre todo, en violencia empleada por
la policía, recordemos que durante las protestas los enfrentamientos con la
policía llegaron a provocar por lo menos 4 muertos uno de ellos por heridas de
bala, un momento que fue grabado por los propios manifestantes y subido a las
redes sociales ver video aquí. Así, las redes
sociales se convirtieron en fundamentales para mostrar la brutalidad de la
policía turca, lo que generó una fuerte solidaridad internacional y la
extensión de las revueltas a infinidad de rincones de Turquía.
Ante todo esto
las protestas en Estambul se volvían gigantescas, ya no sólo había
enfrentamientos en los alrededores de la plaza Taksim, y grandes zonas de la
ciudad de Estambul vivían verdaderos combates entre la policía y
manifestaciones. Ahora Taksim a
modo de la Plaza Sol
en Madrid durante el verano del 2011, se convirtió en una mini ciudad con una
gran acampada gestionada por los propios manifestantes, en ella se daban cabida
miles y miles de personas, se llegaron a contar más de 3000 tiendas de campaña,
pero a diferencia del 15M aquí si participaron distintas organizaciones
políticas.
Tal era la
cantidad de organizaciones que se encontraban en la plaza, que se creo la Plataforma de
solidaridad con Taksim, que reunía a más de 70 de las que participaban en la
acampada. Esta situación se prolongó durante algo más de 2 semanas, lo que hizo
que Erdogan perdiera los nervios más de una vez y hablara en los medios de
comunicación calificando de terroristas a los manifestantes ver video aquí
pero sabéis de que eran sobre
todo calificados los manifestantes, de Çapulcus. Palabra que es
un homónimo de nuestro perroflauta, y es que los políticos no son muy
imaginativos y se repiten allí donde estén, sin embargo, ese calificativo está
muy lejos de la realidad, y en Turquía participaron toda clase de personas, religioso,
ateos, multitud de organizaciones políticas de izquierda, hinchas de futbol,
organizaciones de gays y lesbianas, para quienes las protestas significaron
mucho ya que está muy perseguidos por las políticas de Erdogan, y un largo etc
Con
este panorama de revueltas generalizadas en una gran parte del país llegamos al
sábado 15 de junio. La noche de ese
sábado se va ha producir el brutal y definitivo desalojo de la plaza Taksim y
del parque Gezi, con lo que, podríamos decir, comenzaría la segunda fase de las
revueltas en Turquía. Con este
desalojo las protestas dejan de tener un punto físico de encuentro en la
acampada y se comenzarían a crear las asambleas de barrio en donde la gente
comenzaría a preguntarse por el.... ¿y ahora qué? ver video aquí
Son en estas
asambleas donde se hacen más visibles y patentes muchas de las características
de las protestas y el verdadero
significado que estas están teniendo en muchos turcos. Estas asambleas adoptan el leguaje de signos como ya se hiciese aquí con el
15M, se empieza a pedir a las personas que participen en ellas que lo hagan
dejando de lado su adscripción política, que no las conviertan en un mitin
partidista vamos, además mucha gente que participa en estas asambleas se
declaran como nuevos activistas, dicen no tener líderes, etc., etc., el 19 de
julio ya existen 35 asambleas barrio en Estambul. Van
surgiendo también comisiones de trabajos, se recogen actas que se suben a
Internet y en definitiva se crea una línea de trabajo con expectativas a más
lago plazo con la idea de crear un proyecto político.
Para terminar
nos quedamos con las palabras de una chica que ante estas asambleas dice, “Los
turcos no estamos acostumbrados a escucharnos, siempre nos estamos
interrumpiendo, siempre peleando, esto es como un milagro” Y es que allí como
aquí, las asambleas sirvieron en primer lugar para poner en contacto a las
personas con las personas.
La Oveya Negra
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