Ya estamos en nuevo año, pero las cosas siguen
igual y para mantener la tradición, enero, nos recibe con nuevas subidas…
Y
es que el 2012 ha
creado una nueva tradición, que los políticos quieren que arraigue como las mismísimas navidades, por
eso, como en el 2012, vuelven a subirnos la luz, vuelven a subirnos el IVA, en
este caso el de las viviendas, vuelven a subirnos el transporte público, y
además, este año, como regalo anticipado de reyes, nos suben la edad de
jubilación y se aumenta de 15 a 25 años el periodo para
calcular la pensión. Pero tranquilos, todo esto lo hacen por nuestro bien, para
que salgamos pronto de la crisis y es que la crisis se soluciona pagando la
deuda que el Estado tiene con los Bancos, bancos que son los mismos a los que
luego el Estado rescata con los impuestos que nos cobra y que no para de
subirnos…
Esta canción ya nos la conocemos, llevamos, nosotros
y mucha otra gente, repitiéndola una y otra vez y ya, hasta a nosotros mismos nos
está cayendo pesada…Pero bueno habrá que
repetirlo las veces que haga falta, lo que pasa que a veces uno se pregunta si
sirve de algo, y no es que seamos pesimistas pero es que cuando te das de
bruces con la realidad, duele y es que la semana pasada, en la concentración en
apoyo a Alfonso, un chaval que lleva detenido desde la huelga general del 14 de
noviembre, se nos mostró otras “tradiciones”
que son nuestras y que nosotros nos imponemos. Nos mostró, la tradición
de la falta de movilización social, ya que apenas se reunieron 200
personas, y también, esta concentración,
nos mostró, una vez más y para variar, la tradicional división de la izquierda.
Desde
la Oveya negra
ya estamos hartos de no decir las cosas por su nombre, ya que cuando algo sale
mal o funciona mal, ocultarlo, no hace que se solucione y es que no exponer que
existe un problema de movilización social, una vez se sale del clientelismo de
grandes sindicatos y partidos, no es sólo faltar a la verdad sino que es evitar
la solución al problema, como a su vez, ocultar el problema del sectarismo y
enfrentamiento continuo de la izquierda, no es sólo faltar a la verdad, sino
también empujar a mantener esta desunión
de manera permanente
Desde
la Oveya negra
estamos más que hartos de callar, por que como en cualquier otra faceta de la
vida, ocultar un problema no sólo no lo soluciona sino que lo acrecenta, así, que como deseo de este año, pedimos a todos,
también a la izquierda, acabar con esa fea tradición, y que de una vez por
todas se saque la basura a la calle, por que es imposible barrer la casa de
todos, si uno tiene la suya sucia.
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